AbE en el Corredor Ecológico del Bosque Seco: gestión de ecosistemas y gobernanza multinivel inclusiva para reducir vulnerabilidades y aumentar la resiliencia ante los efectos del cambio climático en las comunidades locales
Información del proyecto
Ecuador es uno de los 20 países megadiversos del mundo con una gran variedad e interrelación de ecosistemas que proveen numerosos servicios ecosistémicos y bienes ambientales. El país está dividido en cuatro zonas geográficas naturales bien definidas: Costa, Sierra, Amazonía e Islas Galápagos, y cuenta con 91 tipos de ecosistemas.
El Bosque Seco es un ecosistema único y frágil de la zona costera del Ecuador, compuesto por vegetación adaptada a condiciones climáticas extremas debido a la acción de la Corriente de Humboldt. Estas condiciones resultan en vegetación xerofítica, precipitaciones concentradas en pocos meses del año (>600 mm) y una temperatura media anual de 24,9 °C. Este bosque seco proporciona beneficios (servicios ecosistémicos) a los seres humanos esenciales para la vida, el bienestar y el desarrollo sostenible.
Este ecosistema está amenazado: de los bosques secos y sabanas tropicales que hoy cubrían las tierras provinciales, solo quedan 1%. La población de la sierra Chongón-Colonche enfrenta importantes desafíos socioeconómicos, pero también tiene un gran potencial de desarrollo basado en el uso sostenible de sus recursos naturales.
El proyecto busca consolidar el modelo de gestión ecosistémica del Corredor Ecológico Bosque Seco de la Sierra Chongón-Colonche (ubicadas en las provincias de Manabí, Santa Elena y Guayas) a través de una gobernanza basada en la corresponsabilidad multinivel e inclusiva de actores; la inclusión progresiva de la AbE en los planes locales, normativas, estrategias provinciales e interprovinciales y la promoción de una extensa articulación geográfica y participación ampliada de actores.
El proyecto fortalecerá la conciencia y la comprensión de la importancia de los activos naturales y los servicios ecosistémicos en la resiliencia y el desarrollo local a través de programas de capacitación y eventos de sensibilización, desarrollo de guías prácticas y entrega de herramientas técnicas, creación de espacios permanentes para el debate, análisis crítico y toma de decisiones participativa.